Suboficial IM (R) Bristoldo Urzúa integrante de expedición chilena en alcanzar la cima del monte Everest dictó una charla en la Escuela Naval

Valparaíso. “Estar en la cima del mundo es como estar en el paraíso y el infierno al mismo tiempo”, con estas palabras el Suboficial IM (Inf.Co) (R) Bristoldo Urzúa comenzó su charla al cuerpo de Gente de Mar de la Escuela Naval, quien contó su experiencia de haber participado el año 2016 en la primera expedición chilena de haber llegado a la cima del monte más alto del mundo por la cara norte del monte Everest, ruta jamás completada por andinistas chilenos hasta ese entonces.

Dicha actividad se llevó a cabo el día 29 de septiembre en el auditorio de nuestra Alma Mater, la que contó con la presencia del Director del plantel, Capitán de Navío Federico Saelzer, el Jefe del Departamento Ejecutivo, Capitán de Corbeta IM, Alejandro Carrasco y el Condestable, Suboficial Mayor IM, Luis Garrido.

En la oportunidad el Suboficial Urzúa contaba a todos los presentes que dicha expedición tuvo una duración de dos meses hasta alcanzar la cima de los 8.848 msnm, ya que contaban con períodos de aclimatación en cada campamento y trekking entre los 3.000 y 6.000 metros de altura, mencionaba además que, “para llevar a cabo una aventura de esta envergadura no sólo se requiere ser un buen andinista, sino que también hay que poseer una actitud especial frente a la vida, capacidad de resiliencia y un gran optimismo para encarar las adversidades y obstáculos que se iban presentando”.

Destacaba al Cuerpo de Cabo y Sargentos que las cualidades y valores como la fortaleza, perseverancia, resiliencia, confianza, rigurosidad y paciencia son condiciones intrínsecas que se deben mantener en todo tipo de trabajo en equipo, reflejándolo hacia la importancia de llevar siempre por delante un fuerte desafío de superar y alcanzar los sueños.

“La ascensión al Monte Everest se convierte en metáfora para describir el camino de una persona deberá emprender para cumplir sus desafíos. Ésta es una invitación a reflexionar sobre las etapas de tal aventura y cómo en ellas se reflejan las dificultades que encontramos cuando tenemos un objetivo que alcanzar”, expresó el Suboficial Urzúa.

Luego para finalizar esta interesante y desafiante charla de experiencia personal de una aventura que pocos pueden alcanzar, el Comandante Saelzer entregó un presente de agradecimiento al Suboficial quien además durante 5 años fue parte de la Escuela Naval como instructor del Cuerpo de Cadetes Infantes de Marina desde el año 1996 al 1999.